Aunque hay varias rutas de buque de carga directas a España, la forma más popular para llegar a España para furgonetas es, por lo general, la ruta de Dover a Calais y luego ir en coche a través de Francia. Esto es así porque normalmente es la forma más económica y eficaz de que los mensajeros lleguen a España.
Conductores de Furgonetas
Dado que los conductores de furgonetas no están vinculados a los tacógrafos, pueden cruzar Francia mucho más rápido que los conductores de vehículos rígidos o articulados (que están sujetos a restricciones de conducción).
DFDS opera 10 veces al día de Dover a Calais, con un trayecto de unos 90 minutos. Para aquellos que tienen todavía más prisa, la ruta de Folkestone a Calais en Eurotunnel es también una opción popular. Todos estos trayectos ofrecen billetes abiertos, por lo que son ideales para los que necesitan flexibilidad.
Camiones
Para que vehículos rígidos y articulados lleguen a España, las mejores rutas suelen ser las directas. Partiendo dede la costa sur de Inglaterra hasta el norte de España, está Brittany Ferries, con rutas desde Portsmouth a Santander o Bilbao. Los buques de carga directos a España normalmente tardan unas 24 horas, lo que permite un largo período de descanso a bordo.
Por supuesto, también hay excelentes instalaciones a bordo, como camarotes, restaurantes y bares, que permiten un viaje completo y relajado en lugar de conducir por las carreteras. Los ferries a España normalmente tienen salidas unas 3 o 4 veces a la semana.
Otras Opciones
Otras opciones de ferry para viajar a España es conseguir un ferry desde Inglaterra a Bretaña, y conducir por el oeste de Francia hasta el norte de España. Esta es una buena opción si no quiere ir en ferry todo el camino hasta España, pero igualmente quiere poder descansar bien durante la noche teniendo acceso a un camarote, etc. Algunos ejemplos de estas rutas, ideales para todo tipo de vehículos de carga (furgonetas, camiones y vehículos articulados), son las de Portsmouth a St Malo y Portsmouth a Caen.
Ambos servicios son operados por Brittany Ferries y tardan entre 6 y 11 horas dependiendo de la calma de los mares.