Siempre debe estar atento a la amenaza que suponen los emigrantes y los inmigrantes ilegales cuando viaje en ferry.
Sin embargo, hay algunos consejos prácticos que debe tener en cuenta. Los funcionarios de la Fuerza Fronteriza se encargan de controlar la entrada en la frontera, y sus responsabilidades incluyen controles de inmigración y seguridad y prevención del tráfico de personas. La Fuerza Fronteriza y la Agencia de Fronteras del Reino Unido han elaborado una lista de comprobación que se completará después de la carga, después de cada parada y como comprobación final. Se realizará una comprobación adicional si el tiempo entre la tercera comprobación y el embarque es de más de 15 minutos. Lo que se comprobará será:
- Interior del vehículo/remolque
- Bajos y techo para detectar daños
- Compartimentos externos
- Parte de abajo del vehículo
- Cordón TIR apretado y en su lugar y comprobado (incluyendo físicamente para evidencia de manipulación, en particular, que haya sido cortado y reinsertado)
- Cierres y candados. Deben ser comprobados físicamente para asegurarse de que no hayan sido cortados, rotos y reparados. Si un candado cuesta de abrir o cerrar, puede significar que ha sido manipulado
- Control de terceros (por ejemplo, con dióxido de carbono u otro tipo de equipo)
- Cabina del conductor. Si está viajando por Calais, Coquelles o Dunkerque, la comprobación final será antes de entrar en la zona de control del Reino Unido. Si está usando otro puerto, la comprobación final se realizará inmediatamente antes de embarcar en el ferry.
Siempre se anima a los conductores a aprovechar cualquier control previo al embarque para obtener una confirmación por escrito del mismo. Los principales intereses de los funcionarios del Ministerio del Interior son confirmar que las empresas están operando su propio sistema de seguridad basado en el Código de Prácticas. El papeleo que apoya estos sistemas debe incluir una lista de verificación que debe ser completada y firmada por el conductor y que debe ser verificada y guardada del mismo modo que los tacógrafos o los registros de mantenimiento.
Las penas por llevar clandestinos a bordo varían hasta un nivel máximo de 2000£ por polizón. La cantidad real impuesta debe reflejar el grado respectivo de negligencia del conductor, operador y/o arrendatario.
No hay responsabilidad si se puede demostrar que un conductor
- No sabía y no tenía motivos razonables para sospechar que un clandestino estaba, o podría estar, ocultado a bordo de su vehículo
- Ha seguido un sistema eficaz en relación con el vehículo para prevenir el transporte de clandestinos
- En la ocasión en cuestión, la persona o personas encargadas del funcionamiento de ese sistema lo hicieron correctamente