Nuestra guía de verano para conductores incluye consejos para mantenerse fresco y estar preparados para las altas temperaturas.
Durante los meses de verano, los conductores de camiones y furgonetas deben tomar medidas adicionales para prepararse tanto para viajes cortos como largos.
A continuación, explicamos cómo pueden mantenerse frescos los conductores durante el verano, garantizando así un viaje tranquilo.
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Mantenerse protegido (e hidratado)
Empecemos por lo básico.
Proteger la piel y los ojos de los rayos ultravioleta es tan importante en la carretera como fuera de ella.
La exposición prolongada al sol puede aumentar el riesgo de cáncer de piel y dañar gravemente la vista. A la larga, incluso el reflejo de la luz solar en la superficie de la carretera puede dañar la vista. Además, la deshidratación puede provocar insolación y agotamiento por calor.
Las gafas de sol (con protección UV400) y la crema solar protectora son la mejor defensa del cuerpo contra los rayos UV, mientras que tomar agua en abundancia ayudará a regular la temperatura corporal.
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Llevar lo esencial
Una parte importante del calor corporal procede de la cabeza, la cara y el cuello. Para reducir la temperatura corporal de forma fácil durante viajes largos, basta con mantener una toalla fría y húmeda sobre la frente o el cuello durante varios minutos.
(Esto debe hacerse únicamente cuando el vehículo esté aparcado de forma segura).
La mejor manera de guardar estas toallas y mantenerlas frescas con el calor es utilizando una bolsa isotérmica llena de paquetes de congelación. Para guardar el agua también se pueden utilizar neveras portátiles.
Otros elementos esenciales que hay que llevar son medicamentos contra el dolor de cabeza, alergia o rinitis, así como gel de aloe vera para tratar las quemaduras solares y un sombrero para protegerse.
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Cuidar el aire acondicionado
Cuando conducimos durante los días calurosos, lo primero que hacemos la gran mayoría de nosotros es poner el aire acondicionado. Aunque los demás consejos de esta lista son importantes, utilizar el aire acondicionado o el climatizador es quizá una de las mejores maneras de mantenerse fresco durante los días de mucho calor.
Por eso es vital cuidar del aire acondicionado, para que esté siempre disponible cuando más se necesita.
Hay varias formas de hacerlo:
Mantener las ventanas cerradas
Puede sonar contraintuitivo, pero abrir las ventanillas cuando está puesto el aire acondicionado puede afectar a su rendimiento. Para su correcto funcionamiento, hay que dejar las ventanillas cerradas.
Poner el aire acondicionado todas las semanas
Aconsejamos poner el aire acondicionado durante 10 minutos seguidos para optimizar el rendimiento del compresor y mantener una presión de gas óptima.
Recargar
Si notamos que el aire acondicionado ya no enfría con la misma eficacia que antes, puede que haya llegado el momento de recargar el refrigerante.
El mantenimiento del aire acondicionado no tiene por qué ser costoso ni llevar mucho tiempo, pero puede ahorrar mucho más tiempo y dinero en el futuro si nos aseguramos de que el aire acondicionado funciona cuando más se necesita.
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Comprobar la presión de los neumáticos
Durante la temporada estival, es habitual que se produzcan reventones de neumáticos en la carretera.
Esto se debe a que los neumáticos dañados o poco inflados sufren una mayor fricción cuando hace calor, lo que provoca retrasos en los trayectos.
Para evitar estos retrasos, hay que comprobar siempre la presión de los neumáticos del vehículo antes de salir.
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Estar atento al entorno
Los reventones de neumáticos no son el único imprevisto para el que los conductores deben estar preparados.
Desde turistas en moto hasta tormentas de verano, los conductores deben esperar lo inesperado durante el verano, especialmente en viajes largos. Hay que estar siempre atento al entorno.
Si notamos que el calor empieza a desconcentrarnos, hay que detenerse y tomar un merecido descanso.
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Viajar con mascotas
El mejor amigo del hombre merece toda nuestra atención.
Todos los conductores deben estar preparados para combatir el calor del verano, y en especial aquellos que viajan con animales de compañía. Los atascos y otros retrasos pueden hacer que perdamos varias horas de viaje, por lo que es vital tener todas las provisiones que necesitan las mascotas (agua fría, una esterilla refrescante, etc.) y llevar provisiones adicionales para hacer frente a cualquier posible retraso imprevisto en el viaje.
Cuando en el exterior hay 22 ºC, la temperatura en el interior del vehículo puede llegar a los 47 ºC, así que nunca debemos dejar a nuestras mascotas dentro del coche cuando hayamos aparcado.
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Comprobar el depósito de combustible
Durante la parada y el arranque del vehículo, se necesita más combustible. Así, en períodos de mucho tráfico, como en el verano, la cantidad de combustible que se consume es mayor.
Por lo tanto, es importante comprobar el depósito de combustible antes de iniciar el viaje y prever el tiempo necesario para las pausas adicionales para repostar.
Por último, pero no menos importante...
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Descansar varias veces
Tanto si viajamos solos como si viajamos con el mejor amigo del hombre, hacer descansos regulares nos da la oportunidad para refrescarnos, estirar las piernas e incluso encontrar algo de sombra para relajarnos. Además, se puede aprovechar la ocasión para volver a echarnos crema solar, hidratarnos y poner en práctica el consejo nº 2. Es conveniente siempre planificar con antelación y tener una buena idea de dónde se va a parar en el viaje.
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